Niños sin convenio regulador
Los niños sin la protección y regulación de convenio regulador en el contexto de la separación de sus padres están expuestos a las discrepancias de sus progenitores.
La ausencia de regulación paternofilial supone que los derechos y obligaciones de los progenitores respecto de sus niños son indistintos, por lo que la situación puede acabar convirtiéndose en un foco de conflictos.
Desde el momento en el que un Juzgado homologa un convenio regulador o resuelve un proceso contencioso con sentencia, los hijos tienen organizada su vida y los ciudadanos por parte de sus padres. No es de obligado cumplimiento, pues la regulación que se establece en el convenio regulador de los niños es supletoria del acuerdo de los progenitores.
Esto quiere decir que en defecto de acuerdo, hay una regulación a la que «echar mano» y que resuelva cualquier disputa. Niños sin convenio regulador son niños que no tienen regulación aplicable, como ocurre cuando sus padres siguen manteniendo relación sentimental y/o están juntos.
Existe un peligro en el periodo comprendido entre la separación de hecho y la aprobación del convenio regulador en el que los niños no tienen una regulación que les proteja y ello puede dejarles indefensos ante malas prácticas y faltas de entendimiento de sus padres.
Niños sin convenio regulador
Tanto en separaciones con hijos sin matrimonio como separaciones matrimoniales con hijos, el convenio regulador es fundamental. El nombre de los procesos no matrimoniales será «guarda y custodia» mientras que en los matrimoniales será separación o divorcio.
Sea como fuere, lo principal es proteger a los niños y que no se quede en un «limbo» jurídico a la expensa de que sus padres sean capaces de entenderse, pues en defecto de entendimiento, deben de tener una regulación adecuada que haya sido elaborada por un abogado, supervisada por un fiscal y aprobada por un juez.